Kristie Mewis y Sam Mewis son a día de hoy las hermanas de moda en Estados Unidos, las Mewis son las nuevas estrellas del soccer
La leyenda se repite una vez más, como si de Marc y Pau Gasol se tratará pero como futbolistas, la ciudad Weymouth, Massachusetts ha visto nacer una de las alianzas más carismáticas y talentosas de los últimos años en el fútbol femenino, la que forman las hermanas, Kristie Mewis y Sam Mewis en la USWNT. Ambas actualmente en el mejor momento de forma de toda su carrera, en el caso de Sam en el Manchester City y en el caso de Kristie Mewis en Houston Dash.
El pasado 19 de Enero Estados Unidos y Colombia se veían las caras en el que parecía a simple vista un partido de selecciones más en el mundo del fútbol, no obstante, este tuvo tintes de encuentro histórico debido a que los cuatro tantos que dieron la victoria a las yankis, los cuatro estuvieron anotados por parte de una de las hermanas Mewis. Tres para Kristie y uno para Sam.
Debemos tener en cuenta que hablamos de dos futbolistas que jugaron juntas con la selección absoluta por primera vez en el mes de Diciembre, ante Holanda, último partido de Estados Unidos antes en 2021. Justo un duelo después de ver a las Mewis por primera vez en acción con la USWNT ya las hemos podido ver anotar con esta. Debemos recordar que Sam Mewis fue elegida la mejor jugadora estadounidense del 2020.
Tácticamente son dos jugadoras de un perfil algo similar, pero con ligeras diferencias sobre el terreno de juego. Kristie Mewis, la mayor de las hermanas (29 años) emplea un rol mucho más ofensivo, una mediapunta o falso nueve que en ocasiones puede adaptarse también al centro del campo.
Por su parte Sam Mewis (28) juega un rol mucho más táctico allá donde recala. En esta ocasión lo hace en el Manchester City donde es el principal motor del centro del campo junto a Rose Lavelle. Sam es toda una directora de orquestra, omnipresente tanto en la creación del juego como a la hora de defender. A nivel mundial es esta última la que se encuentra quizás un peldaño por encima a su hermana, pues su actual paso por el fútbol europeo le ha dotado de unas cualidades realmente de estrella.
A diferencia que su hermana mayor, Sam Mewis, disputó el mundial de Francia de 2019. Siendo esta la primera copa del mundo absoluta que disputaba una de las hermanas, por aquel entonces el nivel de Kristie todavía no se encontraba en su plenitud, mientras que Sam disfrutaba del mejor momento de toda su carrera, recién llegaba de levantar el anillo de la NWSL con North Carolina Courage siendo clave en la consecución de este.
El hecho de ser hermanas no nos ha privado ver a dos jugadoras que han llegado a la élite de forma muy distinta. Kristie se dio a descubrir en el mundial Sub-17 de 2008, una de las ediciones más emblemáticas de los últimos tiempos, fue en este también donde vimos brillar por primera vez a Dzsenifer Marozsán, esta última se llevó el balón de oro del torneo, dejando a Kristie el balón de bronce de este mismo.
La centrocampista de Houston Dash fue nombrada aquel 2008 jugadora revelación de la federación estadounidense, sin duda alguna todos los focos se centraban sobre ella dejando a su hermana en un segundo plano. Todo lo contrario a una actualidad en la que es Sam quien parece jugar una liga superior a la de su hermana.
Por su parte Sam Mewis llegó al estrellato mundial de una manera algo más habitual aunque también un tanto acelerada. Saliendo de la universidad UCLA Bruins y quemando etapas en el mundo del soccer hasta convertirse en una estrella mundial de la mano de North Carolina Courage. Sam cerró el 2020 como mejor jugadora estadounidense de este mismo año.
En 2008 los periódicos apuntaban a Kristie Mewis como la futura estrella del soccer y a su hermana Sam como una jugadora más, no obstante, el paso del tiempo ha jugado un cambio de roles entre las hermanas. Una lesión de Kristie y una serie de altibajos de esta misma le hizo perder en su día todo el renombre que había ganado. Mientras Sam se acercaba cada vez más a la cima mundial. Las lesiones de Kristie llegaron hasta tal punto que llegó a estar cuatro años sin ir convocada con la selección.
Kristie Mewis y una carrera de estrella
La carrera de Kristie Mewis es posiblemente una de las más completas del mundo del fútbol femenino, tanto a nivel positivo como negativo. Son varios los equipos que han visto jugará la mayor de las Mewis. Empezando por el Canberra United donde debutó como profesional tras salir del Boston ‘college’ y disputó la que ha sido sin duda alguna su peor temporada a lo largo de su existencia.
Tras salir de la W-League marcharía hasta Kansas City donde estuvo cerca de disputar 2.000 minutos en una sola temporada y fue pieza clave en la consecución del playoff. Posteriormente pasó a enfundarse la elástica de Boston Breakers, allí su rendimiento seguiría siendo de lo más positivo y empezó a desarrollar su faceta más goleadora.
Su salida de Boston se produciría a modo de cesión al fútbol japonés y al Bayern de Múnich, dos experiencias por las que pasó sin pena y sin gloria por lo que decidió volver a los ‘states’ de la mano de Washington Spirit donde no logró reencontrarse con su mejor versión. Tampoco lo hizo en su nueva etapa con Chicago Red Stars, en Illinois su rendimiento fue nulo.
De la mano de Houston Dash pudimos ver de nuevo el mejor fútbol de Kristie Mewis, un fútbol que aporta goles y que ha hecho crecer a Houston con el paso de los años. En el plantel de Texas, Kristie ha aumentado su importancia a medida que el nivel de Houston también aumentaba hasta convertirse en campeón de la Challenge Cup.
Sam Mewis, del sueño americano, al sueño europeo
A pesar de su juventud, los logros de Sam Mewis van un peldaño más allá de los de su hermana, empezando por la ya mencionada participación en el mundial de Francia. Sus inicios se forjaron en la universidad de UCLA Bruins, allí saldría rumbo al Pali Blue de la W-League de Estados Unidos cuando todavía la NWSL no era una competición consolidada. Posteriormente pasó a vestir la elástica de Boston Breakers Academy.
Fue a sus 22 años y de la mano de Western New York Flash cuando la pequeña de las Mewis diera el salto a la NWSL, un salto que era algo precoz igual que precoz fue su primer gran título cuando levantó su primer anillo de la NWSL como neoyorquina, por aquel entonces Sam ya era una jugadora con galones en el plantel de la gran manzana.
Cuando Western New York mudo su sede hasta North Carolina Courage, Mewis pasaría a formar parte de North Carolina, donde alcanzó su gran versión futbolística y levantaría otros dos anillos de la NWSL. Aquella generación de fútbol carolinense se recuerda como la más potente de la historia de la competición. Una plantilla de película con un centro del campo liderado por Debinha y Sam Mewis únicamente fue derrotado en seis ocasiones en dos años, una en 2018 y cinco en 2019.
El estado de forma de Sam se mantiene ahora en el Manchester City de la FA WSL, un equipo repleto de estrellas yankees. Podríamos hablar de Sam como la mejor centrocampista de la actualidad del fútbol femenino con el permiso de las Alexia Putellas, Marozsán, Saki Kumagai o Lindsey Horan.
El futuro de las hermanas Mewis
Soy de los que piensan que el Covid-19 ha ‘beneficiado’ a una serie de personas que se han sabido hacer fuertes en la guerra. Es el caso de Houston Dash, es el caso de Rose Lavelle y como no, el caso de las hermanas Mewis. Ambas han subido un peldaño respecto hace un año y se encuentran ahora en la máxima élite mundial.
Kristie ha aprovechado el crecimiento de su Houston Dash para consagrarse como titular indiscutible en la selección nacional y junto a su hermana firmar hazañas como las que venimos presenciando en los últimos días. El aumento de nivel en el fútbol inglés ha salpicado de forma positiva a una Sam Mewis que poco a poco empieza a entrar en los rankings de mejores jugadoras del mundo.
Hoy por hoy Sam y Kristie Mewis están llamadas a liderar la próxima generación de fútbol femenino estadounidense, una generación que tendrá muy difícil igualar a la anterior por la que han pasado: Hoppe Solo, Megan Rapinoe, Carli Lloyd o Alex Morgan. ¿Estarán a su altura las hermanas Mewis?
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