Corría el de 10 Julio de 1999, Estados Unidos se enfrentaba ante China por levantar el tercer Mundial femenino a ojos de la FIFA, tras recorrer un largo camino, además Estados Unidos jugaba y ganaba en casa.
Cambio es quizás la palabra que más resuena en las cabezas de los aficionados al fútbol femenino, un cambio que en Estados Unidos se dio hace ya tiempo, con el triunfo de las de Tony DiCicco en 1999. Aquella victoria mundialista ante China lograría acoger hasta 90.000 espectadores en Rose Bowl de Pasadena, California. Estamos hablando de uno de los días más influyentes en la historia del deporte, mucho más influyente en la historia del fútbol femenino norteamericano.
Brandi Chastain fue la afortunada de anotar el gol de la victoria para las ‘yankis’ en una tanda de penaltis que llegaba tras un empate en el tiempo reglamentario + prórroga.
En dicha edición mundialista se estrenaba el nuevo formato de competición, acostumbrados a ver mundiales de no más de doce equipos, el que albergaría U.S.A sería el primero con hasta 16 selecciones y cuatro grupos en la fase previa.
Una edición que lejos de lo extra deportivo nos dejó momentos para enmarcar en lo que a lo deportivo se refiere, por ejemplo los debuts de selecciones como Ghana y Rusia, siendo ambas dos de las revelaciones del torneo.
Suecia llegaba a 1999 como vigente campeona, aunque tras coronarse como la mejor selección del planeta, le tocaría caer en cuartos de final de la siguiente edición.
El camino de Estados Unidos antes de levantar la Copa ante 90.000 espectadores:
Estados Unidos no lo tuvo fácil antes de llegar a la final, sobretodo en los dos duelos de eliminación, cuartos de final y semifinales. Aunque las de Di Cicco se clasificaron como cabezas de grupo, antes tuvieron que endosar tres goles a Dinamarca, siete goles a una Nigeria que años más tarde se convertiría en una potencia del ‘futfem’ y cerrar la fase de grupos venciendo a Corea del Norte por 3-0, partido cargado de polémica en el ámbito político, no creo que haga falta añadir mucho más.

Una vez alcanzados los cuartos de final y ya habiéndose confirmado como el ‘coco’ del campeonato, las estadounidenses llegaban a la hora de la verdad, a la fase eliminatoria, en la cual tuvieron que enfrentarse ante dos de las mejores selecciones de la historia, Alemania y Brasil, las europeas fueron rival para las ‘yankis’ en cuartos de final, siendo estas últimas quienes se terminaron alzando con la victoria por 3-2. El duelo de semifinales fue mucho más pasional, además de recordarse como uno de los más simbólicos en la historia del fútbol femenino.
La final parecía estar destinada a la victoria de las norteamericanas, así fue, aunque antes de consagrarse como la mejor selección del momento. Las locales tuvieron que enfrentarse a una China que no les puso las cosas nada fácil. El partido terminó por 0-0 en los 120 minutos disputados, aunque las asiáticas por aquel entonces formaban con una formación ofensiva de ensueño. No obstante, aquella icónica línea ofensiva liderada por Sun Wen no pudo superar a Estados Unidos, lo que nos deparó unos penaltis de lo más vibrantes, la guardameta ‘gringa’ Briana Scurry, quien hubo salvado antes un balón en la misma línea de gol, fue la encargada de parar el quinto penal de las orientales, para que posteriormente Brandi Chastain anotará el último tanto desde los once metros dando así la victoria a las locales.
Acto seguido, la artífice de aquel histórico gol corrió hasta el córner, se quitó la camiseta, se arrodilló ante más de 90.000 fieles y rompió a llorar como si no hubiera un mañana. Y así fue como Estados Unidos se alzó con su segundo mundial.
Estados Unidos juega en casa y bate récords:
Aquel mundial fue todo un éxito en el ámbito social, quizás porque su sede fue Estados Unidos, cuyos estadios han apoyado y potenciado el deporte femenino de una gran manera, hasta tal punto que el fútbol femenino sea todavía más rentable que el masculino, aunque no debemos olvidar que los hombres siguen cobrando más que las mujeres en U.S.A por ‘pegar patadas a un balón’.
«Se me quedó la mente en blanco. Solo pensaba: ‘Dios mío, éste es el momento más grande de toda mi vida sobre un campo de fútbol'».
Brandi Chastain sobre su gol en la final del 1999
Dicha edición mundialista acogió un total de 25.000 medios de comunicación, según reflejan los datos de la FIFA, unos medios de comunicación que estuvieron acompañados de 40 millones de telespectadores y nada más y nada menos que 666.000 aficionados en las instalaciones de estadounidenses.
«Esta Copa Mundial ha sido un éxito mucho mayor del que la gente se habría imaginado»
Clinton, expresidente de U.S.A sobre el mundial del 1999
El de 1999 fue también el mundial con más goles por minuto en la historia del fútbol femenino, un total de 128, con una media de cuatro goles por partido, no imagino lo que serían estas cifras en la actualidad. Como dato me gustaría destacar que ningún partido de aquella edición terminó por 0-0 a excepción de la final.
Las primeras estrellas mundiales:
Aquella edición ya nos mostró jugadoras emblemáticas y que tienen un espacio en los libros de historia, empezando por Brandi Chastain, autora del gol de la victoria, y terminando así en nombres como Mia Hamm o Julie Foudy, estas jugadoras fueron las primeras idolas de las; Christien Press, Hoppe Solo o Megan Rapinoe.

Más allá del combinado nacional norteamericano, selecciones como Brasil o China también contaron con nombres para el recuerdo, en el plantel de estas últimas, resaltan protagonistas como Sun Wen, Wei Pu o Yan Jin. No debemos olvidar que las ‘Rosas de acero’ fueron la selección con más goles del campeonato, un total de 19, esta cifra fue gracias a un espectacular tridente de ataque. Sissi fue uno de los nombres a destacar en el combinado carioca.
La coincidencia maldita:
Años antes de que Estados Unidos levantara la Copa del Mundo en el Rose Bowl de Pasadena, Brasil masculino lo había hecho en el mismo estadio ante Italia, a merced de un penalti fallado de Roberto Baggio, ¡en una misma tanda de penaltis, en una idéntica situación y en el mismo estadio! Cuatro años más tarde, Liu Ying falló un penalti a manos de Briana Scurry, para dejar la victoria a las locales, ¿casualidad? no creo.
Netflix honra el logro de las ‘rookies’:
Como ya hemos mencionado anteriormente, el de 1999 fue sin lugar a dudas un significado de evolución, es por eso que la famosa productora de películas y series, Netflix, realizará una película-documental sobre aquella gloriosa edición del fútbol femenino. Netflix ha adquirido los derechos de un libro en el que se narra la historia de aquel mundial, ‘The Girls Of The Summer’, para poder basar así su producción en las páginas que guardan historias icónicas narradas por Jere Longman.

Netflix anunció el pasado mes de Marzo su nueva producción, también confirmó la presencia de actores estadounidenses, no obstante, todavía seguimos expectantes para conocer su fecha de publicación. Bra